Augusto Pastore, de Cachalahueca y Federico Abaca, de Chincho y Poroto tuvieron a su cargo además la animación del festival, en el que se sucedieron las actuaciones de distintos grupos de bailarines, así como bandas musicales.
Bailarines del taller de folklore del barrio Santa Marta, de talleres de danza de la Escuela Vocacional de Educación Artística (EVEA), del Ballet Argentina, la comparsa INTI Raymi, el Ballet Atahualpa Yupanqui y la Academia de Danzas Árabes de Sualy, entre otros, le pusieron ritmo y color a la tarde, mostrando variedad de estilos y calidad artística.
También hubo música para todos los gustos. El grupo La Troya ofreció su repertorio folklórico; La Vorágine le aportó al festival una buena dosis de rock y, el cierre fue con cumbia, a cargo de Impacto K.
Este festival estuvo organizado por la Dirección Provincial de Acción Cultural y la organización del 21° Festival de Títeres Don Quike, y forma parte de las distintas actividades impulsadas desde la Secretaría de Cultura como parte del programa “Somos Cultura”.