“La verdad, estoy cumpliendo el sueño del pibe con esto de ir a cantar al Poncho catamarqueño, era una de mis metas que se venían postergando y, por suerte, ahora se cumplirá”, explica la artista al tiempo que recuerda: “Mi padre siempre me habló maravillas del Poncho, tanto por la concurrencia de público como el calor que tiene la gente y que lo hace una fiesta muy particular, se podría decir que es el Cosquín de invierno…”.
Sobre lo que ofrecerá esa noche en el escenario, Arias aseguró que presentará temas de su trabajo Tuya y Ajena, aunque también habrá tiempo para clásicos que han marcado su carrera artística. “Será mi primera vez cantando oficialmente en el Poncho, aunque ya supe estar una vez, años atrás, pero acompañando a los Diableros de Orán. Siempre tuve la impresión que se trata de un festival típico del norte, pero con un componente turístico más fuerte y que influye en su desarrollo, y que lo transforma en muy particular…”.
Una amplia conocedora de los entretelones de la escena folclórica nacional, Arias reconoce que existen grandes dificultades para las mujeres a la hora de encontrar un lugar donde desarrollar su identidad. "A nivel personal me esfuerzo para no parecerme a nadie, porque mi objetivo es que se reconozca mi trabajo en cualquier escenario del país", explicó.
“El folclore de Catamarca siempre ha tenido una esencia muy propia y que supo mantenerse vigente, pese a que en Salta, por ejemplo, encontrás un cantor en cada esquina. Pero el nivel y la jerarquía de la música de raíz folclórica catamarqueña ha sabido marcar un rumbo en el ámbito nacional y está ahí, latente de poder encauzarse nuevamente y florecer otra vez como años atrás”, concluyó.