"Sergio Marchi (titular de Agremiados) nos comunicó anoche de esta situación, pero lo concreto es que la deuda para con el plantel es de un 25 por ciento del sueldo de enero y todo febrero, algo normal en cualquier club del fútbol argentino", dijo.
Los futbolistas estaban citados a las 9.30 de hoy en el estadio Centenario, pero luego de una reunión que tuvieron anoche en el gremio, tomaron la decisión de no entrenarse a la espera de una respuesta de la dirigencia.
"Por la falta de actividad bancaria del fin de semana largo yo les había comunicado a los referentes el miércoles pasado que íbamos a tardar unos días para regularizar lo adeudado. Nosotros siempre nos manejamos igual con la directiva, sin poner fechas fijas de pago si no estamos seguros de poder cumplirlas", aclaró García.
"El presidente (del club) Aníbal Fernández ahora está generando una propuesta económica para presentarle al plantel. Nosotros entendemos que no se nos reconoce el esfuerzo que realizamos para mejorar constantemente la logística del equipo", señaló.
En el mismo sentido, García precisó que abrir el estadio le cuesta a Quilmes "150.000 pesos, y el ingreso más importante que tiene la institución es el de la televisión".
"Lo que pasa es que en Argentina está instalado eso de hacer reclamos económicos cuando los equipos están peleando campeonatos o el descenso", apreció.
Quilmes, que está quinto con 12 puntos y afuera de la zona de descenso, recibirá el próximo sábado a San Martín de San Juan, desde las 20.15, en el estadio Centenario, por la octava fecha del Torneo Final 2013.
"En el partido con Lanús (2-2) el árbitro Patricio Loustau nos perjudicó al no cobrar un claro penal de (Agustín) Marchesín a (Gustavo) Oberman. El dijo que había sido un invento del comentarista de televisión Julio Ricardo cuando se lo fuimos a reclamar al vestuario. Por eso, evaluaremos pedir que no nos vuelva a dirigir", concluyó el dirigente.
Fuente: Télam
