Fue muy difícil ver jugadas elaboradas porque la pelota se frenaba o se iba larga según el sector del terreno de juego, por lo que las mejores situaciones llegaron por arriba o por errores defensivos.
Brasil se familiarizó más rápido con la pelota mojada, aunque las mejores chances las tuvo el seleccionado dirigido por Sergio Batista. A los 19 minutos, Juan Neira con un enganche iba a dejar en el camino al lateral derecho Patric Cabral y habilitó a Eduardo Salvio, quien definió a las manos del arquero Renán.
Enseguida llegó la réplica de los dirigidos por Lourenco, con un centro atrás de Bruno Ferreira que despejó defectuosamente al tiro de esquina Maximiliano Oliva.
A los 23 minutos, el árbitro Uruguayo Liber Prudente iba a ser determinante, porque argentina tuvo un tiro libre en ataque desde la derecha que ejecutó Iván Bella desde la izquierda. Neira cabeceó y convirtió el gol por arriba del arquero Renán, pero el línea colombiano Wilson Berra levantó la bandera cobrando un offside que nadie vio.
A partir de ahí, Argentina emparejó la tenencia de la pelota y a los 25’ tuvo otra vez la posibilidad de abrir el marcador con un cabezazo errático de Fernando Tobio. A los 28’, Bella envió un centro frontal que Diogo Silvestre peinó hacia su propia valla, obligando a la gran respuesta de Renán.
A los 36’, Brasil hilvanó un gran contragolpe que finalizó el delantero Walter definiendo al lado del palo derecho del arco defendido por Rodríguez. (Telam)