"Me siento bien, aunque está claro que me falta ritmo de juego. Al principio sentí un poco de miedo, pero con el correr de los minutos se me pasó", afirmó Crespo, quien estuvo en la cancha durante 70 minutos.
Crespo, de 27 años, quien había sufrido un serio desgarro en el aductor, el 12 de enero, en un partido frente a Módena por el campeonato italiano de primera división, volvió a las canchas y también al gol, ya que convirtió uno sobre el final del primer tiempo de cabeza. (Télam).