¿Acaso la ausencia de la “Bruja” Verón -emblema del equipo- es tan determinante en el conjunto albirrojo? Quizás, pero el capitán está fuera de la cancha desde hace apenas dos fechas y la carencia de triunfos se remonta mucho más.
El desgaste físico de los jugadores, posiblemente, sea uno de los factores que influyen en el resultado. No hay buen estado, no hay ganas y el aguerrido equipo pincha es hoy, dentro de la cancha, una réplica deslucida de aquel que enfrentó al Barcelona en el Mundial de Clubes.
Ya afuera del torneo, eliminado de la Libertadores, y hoy clasificado dentro de la Copa Sudamericana gracias al empate, Estudiantes compite por algo que pesa más en todos los hinchas: defender la historia, la dignidad del campeón, el cuidado el honor que llevo al club a los más alto objetivos.
No son pocos los golpes que recibió el equipo en el último torneo. La salida de Alejandro Sabella fue una paliza letal para jugadores e hinchas.
Sabella dejó un equipo armado, parecido al conjunto que Eduardo Berizzo hoy está limpiando: ayer quedaron afuera del equipo titular Maximiliano Núñez, Pablo Barrientos y Gabriel Peñalba.
Al “Toto” se lo recibió con el desconsuelo de saber que iba a ser difícil reemplazar a un técnico que llevo a Estudiantes a la gloria. Pero, a la vez, se le dio una oportunidad de demostrar lo aprendido en tantos años de trabajo junto al ex entrenador de la Selección, Marcelo Bielsa.
El equipo no muestra hoy juego, no se luce ni pelea. El técnico, que apenas da indicaciones durante el encuentro, realiza los cambios tarde. Ejemplo de ello, fueron los tres cambios de ayer frente a Tigre en los últimos 20 minutos del partido.
La localía también parece incidir en el equilibrio futbolístico del Pincha. Las pésimas condiciones del césped del Estadio Unico generaron molestias físicas y de movilidad, que afectaron notablemente el funcionamiento del equipo.
Quizás haga falta tocar fondo para que el equipo pueda, de una vez por todas, salir adelante. Son muchos los partidos sin ganar, con el capitán lesionado y encima sin competir por los grandes títulos.
Florencia Alamos(Telam)