En el partido con San Martín de San Juan, que estaba pendiente de la primera fecha, surgieron discrepancias en el seno del público, ya que los hinchas pacíficos se instalaron en la popular sur, para diferenciarse de la "barra brava", a la que acusan de haber echado a Antonio Mohamed y de recibir una remuneración de la Comisión Directiva.
Esa situación creó anoche un clima desagradable en el estadio Libertadores de América, con cánticos cruzados y agresiones, además de banderas con leyendas agraviantes de uno y otro lado.
Hubo peleas, robo de banderas por parte de la "barra" que invadió después del partido la tribuna sur y se registraron seis heridos, tres por lado.
La policía demoró a una persona pero en general se vio cómo actuaban libremente los "barras", uno de los cuales desmontó una cámara de seguridad con toda tranquilidad, subido a una escalera.
Por su lado los jugadores festejaron entre ellos los goles y al final del partido saludaron a las plateas y a la tribuna sur.
La "barra brava" colocó una bandera que decía "Turco mentiroso y cagón", en contra de Mohamed; el público y los hinchas comunes fustigaron al presidente, Julio Comparada, y pusieron una bandera
que lo comparaba con el ex conductor de Racing Daniel Lalín
También hubo cánticos como "ahí están, ahí están, los que les pegan a los hinchas de verdad" e incluso Pablo Alvarez, el jefe de la "barra", fue acusado de amedrentar a socios y simpatizantes vía Facebook.
La Agrupación Independiente Místico, por su parte, repudió los hechos y resaltó "el buen comportamiento de los socios e hinchas, que evitó una tragedia".
El nucleamiento político calificó a la conducción del club de "incapaz e inútil para resolver los gravísimos problemas que aquejan a Independiente", en tanto que remarcó que "haciendo gala de un cinismo absoluto, persiste en evadir sus responsabilidades estatutarias como órgano de gobierno".
Recordó entonces la pedrada al arquero de Defensor Sporting Martín Silva durante la Copa Sudamericana, para oponer ese hecho a la afirmación de Comparada en el sentido de que el club no es escenario de hechos de violencia.
"Independiente hoy, es una vergüenza por sus dirigentes, pero es una esperanza para todo el fútbol argentino por sus socios e hinchas, que resisten los embates continuos que la administración Comparada le ha lanzado por más de seis años", subraya la nota.
Y agrega: "Seis años de mentiras, incumplimientos e incapacidad para resolver, así como una llamativa habilidad de profundizar los problemas del club y, de forma inconcebible hoy al llegar al fin de su mandato, pretende cercenarle al socio e hincha lo único que le queda, el poder de manifestarse libremente en su estadio".
Finalmente, Pedro Larralde y Rubén Manuel Vázquez, secretario general y presidente de Independiente Místico, exigieron "la adopción de las medidas institucionales y jurídicas que correspondan para garantizar la seguridad de todos los socios e hinchas".
Fuente: 26noticias.com.ar