"Apenas van 10 días de trabajo con el grupo completo. Pero esta gira por Europa será muy beneficiosa para lograr lo que buscamos, que es ponernos a punto antes del comienzo del campeonato", prosiguió Manu, quien ayer participó junto a sus compañeros de equipo en el acto en el que se bautizó al estadio polideportivo del CENARD con el nombre de León Najnudel, creador de la Liga Nacional. Por la noche, en la última presentación en la Argentina antes del Mundial, el seleccionado derrotó por 85 a 72 a Nueva Zelanda.
En tanto, el pivote Fabricio Oberto reconoció que la experiencia obtenida en el último Mundial y en los Juegos Olímpicos será fundamental al momento de hacer diferencia con el resto de los equipos: "Todo lo que nos quedó de Indianápolis y de Atenas es algo que los demás no tienen. Eso, para este tipo de torneos, es muy importante. Esperemos que podamos dar la vuelta para darle una alegría a toda la gente que nos estará siguiendo, pero hay que decir que es complicado porque muchos equipos van a ir para ganar".
Además, el pivote de San Antonio Spurs reconoció que después de tantos logros, la mirada del mundo hacia la Argentina cambió: "En este Mundial va a ser todo diferente, porque si nos va bien ya nadie va a decir que fue una sorpresa. Todos esperan vernos arriba en el podio. Esperemos que estos partidos que nos quedan por España y Singapur sirvan para seguir ganando nivel y continuar mejorando día a día. Después de cada partido que hacemos juntos, se nota que estamos un poquito mejor".
Por su parte, Leonardo Gutiérrez expresó: "Este torneo será nuestro gran desafío, porque todos recordamos que la última vez que estuvimos en un Mundial, el título se nos escapó en la última pelota. Aunque la medalla de oro en Atenas fue una especie de revancha, si logramos el campeonato mundial sería el broche de oro para esta generación que ya ganó tantas cosas. Ahora hay que trabajar, porque las palabras solas no sirven. Por eso habrá que hacer las cosas bien durante el Mundial y ahora, en estos partidos previos, tendremos que ajustar todas las piezas para llegar en el mejor nivel posible".
Y concluyó: "Todos nos piden que volvamos campeones, pero nosotros tenemos que ir con tranquilidad. Estar en el podio ya sería algo positivo. De cualquier manera, es obvio que nosotros vamos a intentar salir primeros, pero hay rivales muy duros, como Estados Unidos, España, Lituania, Francia, Alemania o hasta Brasil, al que ya le ganamos hace un par de días en Santa Fe. Todos se preparan para el mismo objetivo y no vamos a ser los únicos candidatos".
Japón, entre los husos horarios y la comida
"Me gusta mucho el sushi, así que creo que me voy a adaptar bien a la vida en Japón, je", bromeó el base Juan Ignacio "Pepe" Sánchez al hablar con www.deportes.gov.ar, aunque enseguida se puso serio: "Está claro que nuestro objetivo es salir campeones, porque si no fuera así, ni pensaríamos en ir a Japón. Igual, tenemos que tener los pies sobre la tierra, porque el camino es muy duro y habrá que tener paciencia. Los rivales también juegan y hay algunos que nos harán las cosas difíciles".
Y en cuanto a la preparación, advirtió: "Lo que necesitamos ahora es jugar más que entrenarnos, porque ya nos conocemos mucho. Por eso, pasar minutos en cancha contra algún rival nos viene muy bien. Creo que tanto los partidos amistosos que ya jugamos como esta gira que vamos a afrontar ahora por Europa, fueron cosas muy bien planeadas para alcanzar ese rodaje tan necesario".
Al contrario de Sánchez, Leo Gutiérrez mostró su preocupación al momento de hablar de la alimentación en el país asiático: "Va a estar muy difícil. El año pasado estuvimos en China y la comida era horrible, incomible. Me imagino que ahora el tema va a ser bastante parecido. Esperemos conseguir algo normal para comer. El huso horario no me preocupa tanto, porque varios de chicos juegan en Europa y están acostumbrados a la diferencia".