Por eso, este sábado habrá más de mil efectivos policiales (entre Policía Federal y de la Provincia de Buenos Aires), una custodia especial para el traslado de las dos parcialidades y dentro del estadio José Amalfitani habrá pulmones bien marcados para dividir a las hinchadas.
Hasta ayer a última hora el gerenciador de Racing, Fernando De Tomaso, intentó conseguir más entradas para la gente de la “Academia”, que agotó las 3.500 localidades que tenían disponibles en cuestión de minutos.
La gente de seguridad, con Javier Castrilli a la cabeza, rechazaron este pedido y le explicaron a De Tomaso que la decisión se tomó para que los hinchas de los dos equipos estén bien separados, según le confirmaron a Télam fuentes de la entidad de Avellaneda.
Además, De Tomaso se informó sobre los detalles del operativo, en especial a lo que pueda suceder en la tribuna de Racing, debido a que muchos temen que si el equipo que dirige Juan Manuel Llop llega a ir perdiendo se produzcan desmanes en ese sector de la cancha, algo que sería muy grave para la “Academia” porque podría recibir como castigo la quita de puntos.
También el presidente de Independiente, Julio Comparada, intentó conseguir más generales para su gente, pero recibió la misma negativa que De Tomaso. Los simpatizantes del “rojo” agotaron las 7.000 generales que se pusieron ayer a la venta.(Telam)
