Un cabezazo del volante Lucas Pusineri a cuatro minutos del final del clásico le devolvió el corazón y la fe a un Independiente que temió con la pérdida del título cuando el delantero Guillermo Barros Schelotto puso en ventaja a Boca Juniors a los 38 minutos del primer tiempo.
Independiente lidera el Apertura con 40 unidades, conservó la distancia de tres respecto de Boca y será campeón con sólo empatar el próximo domingo ante San Lorenzo, en el Nuevo Gasómetro.
Boca, que fue superior a su rival pero se privó de la victoria por sus errores en definición, recibirá a Rosario Central con la necesidad de ganarle y esperar una colaboración de San Lorenzo para forzar una final en campo neutral.
( Télam)