Estos tres futbolistas se encontraron en el conjunto que dirigía Fran Kudelka y en diferentes encuentros era constante la presencia de la música, con la guitarra,
"Nos comenzamos a juntar en la casa de uno de los chicos y se tornaron constantes, tanto que cuando podíamos llevábamos la guitarra, y tocábamos algunos temas de bandas de rock nacional", indicó De Miranda.
"Primero nos juntamos con "Nico" y "Seba" y luego se agregó Federico Vismara, en la segunda guitarra, y por ahí se acopla "Maxi" Bellone como segunda voz, pero en general somos tres los que nos encontramos y matamos el tiempo", agregó.
"La Terraza" comenzó a hacer temas de grupos como: No te va a Gustar, La Vela Puerca, Los Piojos, Las Pastillas del Abuelo o de Ciro Martínez, los cuales coinciden Ereros y Dematei que se encuentran en una sala de ensayo "donde todo suena mejor".
Instituto era uno de los equipos que al comienzo del torneo era "candidato" para ascender, con un cuerpo técnico que conocía la categoría y un plantel importante, pero problemas institucionales y económicos hicieron que los jugadores transitaran momentos difíciles, con varios detonantes, como la salida del técnico y además el presidente, Juan Carlos Barrera.
"La música nos unió como grupo, fue un momento duro pero tenemos gente que es muy buena y todos tiramos para el mismo lado. Por eso cuando compartimos mates o algún asado la pasamos tan bien", reconoció Ereros.
Instituto está a las puertas de los puntos por el ascenso a Primera División, luego de tantos problemas institucionales, aunque La Terraza sueña y reconocen que además de subir a la "A" les guataría grabar un demo.
"Es un lindo recuerdo, divertido, esto también es fútbol", dijo Dematei.
De Miranda cuenta que en su ex equipo, Ferrocarril Oeste, comenzaron a juntarse a tocar la guitarra y cantar con compañeros como Jorge "el loco" Carranza, Osvaldo "Flaco" Miranda, o el "Pimpi" Salvatierra, y gran parte del plantel del equipo de Caballito, en un clima "muy bueno, ya que con muchos nos hicimos buenos amigos", reconoció el ex CAI de Comodoro Rivadavia.
Fuente: Télam
