"Todo fue repentino y sucedió a unos cinco kilómetros de haber atravesado la frontera de Angola. De repente escuchamos los disparos contra el micro. Llovían balas de todos lados", recordó el delantero de Manchester City, antes de emprender el regreso junto al resto de la delegación togolesa.
"Todavía estoy conmovido y no entiendo por qué pasó lo que pasó. No podemos quedarnos aquí y jugar como si nada hubiera sucedido. Varios de nosotros no queremos saber más nada de la Copa de Africa", agregó Adebayor, a la BBC de Londres.
"De golpe, el micro se detuvo. En ese momento no sabíamos que era porque las balas habían alcanzado al chofer y lo habían matado. Nos arrojamos instintivamente bajo los asientos y nos protegimos con las maletas, mientras escuchábamos el zumbido de las balas y los gritos de dolor de los heridos", completó.
"Todo esto duró casi una media hora y si hoy estoy hablando con ustedes es gracias a que nuestra escolta, que nos seguía en dos automóviles, logró repeler el ataque. De otro modo estaría muerto", aseguró Adebayor.
"Fueron ellos quienes nos ayudaron a trasladar a los heridos a un hospital cercano y fue entonces que empezamos a entender que había pasado. Yo no podía parar de llorar por los que murieron y por quienes resultaron heridos, pero también por el miedo", confesó.
"Africa debe cambiar la imagen si pretende ser respetada en el concierto internacional, sobre todo este año, que albergará la Copa del Mundo y tiene una buena oportunidad. Quién sabe qué sucederá. Yo sólo se que esto no es justo", finalizó.
Aún antes de conocerse la decisión del gobierno togolés de hacer regresar de inmediato al país a su selección, el técnico italiano de Manchester City, Roberto Mancini, había confirmado el retorno de Adebayor. "Era lo más justo. Lo importante es que él está bien y ahora debe superar el shock que le provocó el haber vivido una cosa así. Después veremos cuándo estará en condiciones de volver a jugar. Es algo secundario", comentó Mancini.
Fuente: La Nación
