Al respecto, explicó que en su tarea "hay que estar continuamente hablando por teléfono, sabiendo cómo están los jugadores". "Todos los días vengo con los preparadores físicos al predio para saber cómo se entrenan Messi, Agüero, Maxi Rodríguez... ver si jugó Jonás Gutiérrez", advirtió, y señaló que "es mucho más de logística que estar viéndolos".
Maradona insistió con que es "muy poco" el tiempo que tiene para inculcarle sus ideas futbolísticas a los jugadores. "Mi llegada fue buena, pero ahora hay que meter conceptos en esa 25 cabecitas: qué tienen que hacer adentro y afuera de la cancha. Yo ya la pasé, y por eso vuelco mi experiencia a disposición del plantel", apuntó.
Respecto al futuro más inmediato, se mostró confiado: "El partido con Brasil nos va a dar la clasificación. Y de ahí vamos a ir a Paraguay con muchas chances de ganar también".
Por fin, dijo estar convencido de la suerte argentina y dejó otra definición: "Un Mundial sin Argentina no sería mundial, no tendría color".(Telam)