Scolari recordó que México (que ganó ocho y empató dos de los 14 partidos jugados con Brasil desde la Copa Confederaciones 1999) se convirtió en un duro rival de los capitaneados por Neymar.
"Está demostrado que siempre que jugamos con México enfrentamos dificultades. Por ello creo que será un partido muy parejo, en el que los jugadores tendrán que cuidarse desde el inicio hasta el final", expresó.
Según el entrenador, la victoria por 2-0 sobre México en la última Copa Confederaciones en el mismo estadio Castelao, no sirve de parámetro para poner a Brasil como favorito en el duelo.
"Si se acuerdan, el segundo gol de Brasil llegó a los 40 minutos del segundo tiempo", advirtió el DT.
"Además, el seleccionado mexicano en los últimos 12 meses cambió dos veces de técnico, y su forma de jugar también varió. En la Copa Confederaciones jugaban en base a un 4-4-2, ahora actúan distinto. Tenemos que estudiar cómo enfrentarlos para poder dañar su juego", agregó.
Scolari demostró además gran admiración personal por el comandante de la "Tri", Miguel Herrera: "Desde que asumió el mando del equipo, armó un sistema bueno, cosechó varios buenos resultados en amistosos y sabe estimular mucho a sus futbolistas. Hoy, México es un equipo guerrero, fuerte, bien ordenado y que juega un fútbol que se merece nuestro respeto".
Tras ganar en sus respectivos debuts, Brasil y México chocarán mañana en Fortaleza y el ganador tendrá, prácticamente, asegurado un lugar en los octavos de final.
Fuente: Télam