Los ladrones no tuvieron tiempo de llegar a la caja fuerte en la que el astro brasileño guarda el preciado trofeo Balón de Oro que le fuera concedido en 2005. Aprovechando un descuido del servicio de seguridad, los ladrones entraron en la casa a través de la ventana de uno de los baños de la enorme residencia, y de ahí al primer piso.
En su declaración a la Policía, los vigilantes aseguran que cuando se dieron cuenta que habían ingresado ladrones a la residencia ya era tarde y que los cuatro malvivientes escaparon en medio de la oscuridad. Los ladrones no tocaron los armarios en los que el jugador tiene sus botines y las camisetas de los clubes en los que ha jugado.(Telam)
INCEGURIDAD
Por: Lorena el 25-12-2008 a las 12:32