En esa reunión se abordaron puntos de fricción sobre los preparativos del evento planetario, y según dijo a la prensa el ministro de Deportes brasileño, Orlando Silva, fue "muy positiva".
"Tuvimos una reunión en la que participó Valcke con nuestra presidenta Dilma (Rousseff) en la que repasamos la preparación de la Copa del Mundo en Brasil (...) y la mandataria reafirmó personalmente su intención de preparar al país para ofrecer las condiciones adecuadas", dijo a la prensa Orlando Silva.
Según fuentes del gobierno brasileño, la FIFA estaba molesta por los retrasos de las obras y preparativos del Mundial 2014 y sobre todo, por un proyecto de ley que regulará la cita planetaria.
Uno de los puntos de fricción es que, en caso de ser aprobada, la ley puede reducir los beneficios económicos que la FIFA prevé obtener durante el mega evento.
"El miércoles irá un grupo de la FIFA a Brasilia", para monitorear la organización del evento, añadió Silva.
"La redacción del proyecto puede ser perfeccionada de manera que todas las garantías que Brasil dio a la FIFA puedan ser cumplidas", aseguró.
La Ley General de la Copa, que fue enviada al Congreso el pasado 19 de septiembre, fija las competencias de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) en materia de protección de las marcas y símbolos del evento, titularidad sobre derechos de transmisión, patrocinios, boletería y hasta concesión de visados de cara al Mundial y a la Copa Confederaciones de 2013.
La presidenta Dilma Rousseff inició el domingo en Bruselas una gira marcada por una cumbre UE-Brasil, que tendrá lugar en plena crisis de la zona euro.
Fuente: 26noticias.com.ar
