A Galarza se lo vio hablando bastante con Messi después de cada jugada errada de Argentina. Cuando le preguntaron por la última pelota que le tapó al jugador del Barcelona, el arquero respondió: "Después de esa estaba muy caliente porque estaba haciendo un gran esfuerzo. Le dije palabras de tranquilidad y después del partido lo felicité".
"Ese mano a mano fue emocionante, fue espectacular. Tenía que esperarlo, no sabía si iba a definir o hacer el clásico globito. Lo aguanté hasta el último momento. Cuando él decidió definir yo ya estaba encima de él", definió el arquero sobre la jugada.
El número uno de Bolivia quedó como un héroe después de salvar una jugada de gol que podría haber terminado con una derrota para su equipo. Messi se lo perdió, pero Argentina logró traerse un punto valioso de la altura de La Paz.
Fuente: playfutbol.infobae.com