Velasco, de 50 años, dejó la Argentina hace veinte y retornará transitoriamente para el Mundial. "El país atraviesa una situación inédita, se transformó para mí en un lugar desconocido: es como ir a jugar un mundial en un país que está en guerra, prácticamente; o en una situación extrema".
Velasco revolucionó el voleibol italiano con un estilo de juego y un plan de trabajo que le permitieron conquistar dos campeonatos mundiales (Brasil `90 y Grecia `94), cinco ligas mundiales, tres campeonatos europeos, y la medalla de plata olímpica. (Télam).-