"En los últimos tiempos se está mirando mucho el puesto y es preferible estar con los pies sobre la tierra. Lo importante es trabajar para estar a disposición cuando el entrenador lo considere", explicó.
Fueron pocas las oportunidades que tuvo Barbosa de mostrarse en el fútbol europeo, por lo que en su llegada al equipo de Núñez acordó con el cuerpo técnico alcanzar ritmo jugando en reserva.
"Acepté jugar en reserva por una cuestión personal de sentirme con ritmo y más seguro cuando el técnico me necesite, yo voy a estar ahí. Me sirvió para tomar confianza. Me sentí muy bien y tengo muchas expectativas", reconoció.
En principio, Gorosito había decidido que Barbosa y Daniel Vega alternen entre banco de suplentes y partidos de reserva, pero las dudas en el puesto hicieron que el ex arquero de Villarreal se perfile para jugar en Lima, algo que terminó de definirse en la práctica de esta mañana realizada en el predio de Ezeiza.
La salida de Juan Pablo Carrizo dejó un gran hueco en el puesto, que no pudo recuperar Diego Simeone en su momento y ahora Néstor Gorosito, quien respaldó a Ojeda desde que asumió, pero el ex Rosario Central quedó expuesto con sus irregulares desempeños.
"Esto es fútbol y hay momentos, a veces pasan estas cosas y no sale nada. En estos casos se muestra la confianza y el grupo se banca a muerte, esas son cosas aparte. En su momento fue duro, se le pegó mucho", remarcó.
{adr}Barbosa no vivió el último semestre de su actual equipo, aunque el domingo pasado sufrió un baño de realidad porque River ante San Lorenzo se pareció más a aquel que sufrió la peor campaña en la historia del club.
"No viví lo que pasó el semestre pasado pero lo que pasó no le gustó a nadie y hay que dejarlo atrás. No estoy acostumbrado a ese tipo de críticas quizás porque esto es River son muy fuertes. Vengo de otro lado, pero estoy preparado para asumir el compromiso", afirmó.
Aunque Gorosito no lo haya confirmado, de no mediar ningún imponderable, Barbosa tendrá el jueves la gran oportunidad de ofrecerse como una variante confiable para un puesto que es de los puntos más flacos de River desde la segunda mitad de 2008. (Telam)