"Me fui a confesar con Dios y me perdonó", bromeó el marplatense, de 27 años, consultado por la victoria que le significó el primer título de su carrera.
Antes de la final en el club Las Salinas, de Viña del Mar, el argentino también le había reconocido facultades todopoderosas al mallorquín cuando tuiteó: "Preparándome para enfrentar a Dios en la cancha de tenis".
Nadal, siete veces campeón de Roland Garros, sólo había perdido antes una final sobre polvo de ladrillo frente al serbio Novak Djokovic y el suizo Roger Federer, número uno y dos del ranking mundial actual, respectivamente.
"Todavía pienso que es un sueño. Lo voy a disfrutar por el resto de mi vida. Fue el mejor partido de mi carrera", declaró Zeballos, que con su consagración en Chile ascendió 30 lugares en el escalafón (del 73 al 43).
Consultado sobre las claves de la victoria, el integrante del equipo argentino de Copa Davis consideró: "Saqué a un gran nivel y eso me dio muchísima confianza. Mi tenis sigue creciendo".
Por último, el marplatense admitió que Nadal "seguramente no esté pasando ahora su mejor nivel", pero no dudó en su recuperación, al asegurar que pronto: "Él estará ganando torneos y yo viéndolo por la televisión".
Fuente: Télam