"Grecia desde hace muchos años viene siendo sometida por políticas neoliberales que nada tienen que envidiarle a lo que le tocó a la Argentina en los 90, y los resultados son muy semejantes incluso hasta más severo es lo que está pasando allá", opinó la economista y docente de la UBA al resaltar las consecuencias de "un ajuste permanente como condición para la refinanciación de sus deudas".
El economista Alejandro Robba consideró que "la Argentina de 2001 no es el caso de Grecia" al entender que la salida de la Convertibilidad del país fue una situación mucho más fácil de resolver que una eventual salida del Euro para los griegos quienes están atados a una unidad económica y monetaria".
"Más allá de que a simple vista parecen procesos similares, es sólo la superficie. La Argentina de entonces no es el caso de Grecia que forma parte de una unidad económica y monetaria que es lo más importante", consideró el economista y docente al señalar que "una salida del Euro que es lo que plantean muchos como algo natural no tendría el resultado del caso argentino".
"Por más que Grecia saliera del Euro y volviera a la moneda nacional -para lo cual no tiene ni las matrices para la impresión del dracma- las posibilidades de crecimiento autónomo no son tan claras como la Argentina de comienzos de siglo", opinó Robba al plantear también una diferencia geopolítica entre los dos casos.
Por su parte, el economista Santiago Fraschina resaltó que Grecia "no tiene instrumentos de políticas económicas, no tiene moneda porque está atada al Euro, no tiene política monetaria porque ni siquiera cuenta con un Banco Central, tampoco tiene política cambiaria, ni política comercial porque pertenece a un bloque ni política fiscal con un estado sobreendeudado".
En ambos casos, Fraschina destacó que "lo que impone el FMI es ajustar para pagar la deuda a los bancos, y Grecia hoy como la Argentina de los 90 enfrentan y enfrentaron las recetas de ajuste de los organismos multilaterales que lo único que hacen es profundizar la crisis".
"En la peor del gobierno de la Alianza, el FMI impuso el descuento del 13 por ciento a empleados del Estado y los jubilados para destinar el dinero a pagar la deuda y profundizó la crisis, y hoy tiene las mismas recetas para Grecia, país al que le siguen imponiendo ajustes, recetas ortodoxas que ya fracasaron en América", sentenció.
Para el ex director del Banco Central, Arnaldo Bocco, "una parte común de la crisis de la Argentina de 2001 con la Grecia actual es que los recursos que fueron parte del salvataje griego hoy queda en evidencia que el dinero nunca entró a aquel país, por el contrario, los salvatajes una vez cierta la imposibilidad de sostener el modelo económico, fue un salvataje a la banca privada", analizó el ex director del Banco Central en declaraciones a Télam.
"En Argentina hubo un sobreendeudamiento que quedó e manos del sector privado y en muchos casos atesorado fuera del país", explicó Bocco en la busca de similitudes y diferencias con el caso griego, aunque resaltó que el distanciamiento que la Argentina decidió con los organismos multilaterales permitió "un camino de autonomía" del que hoy Grecia no puede gozar.
Para Bocco, en el marco del "cortísimo plazo" Grecia va a seguir "pujando por lograr una escapatoria de los condicionamientos que le pone la Unión Europea pero no tiene chances de recuperar su economía al punto anterior porque tiene que seguir endeudándose".
Fuente: Télam
