Hace dos semanas -según consignó la Agencia Brasil- los operadores e inversores estimaban un saldo positivo de mil millones de dólares, y a inicios de noviembre el superávit del intercambio se calculaba en 2 mil millones.
Los datos recogidos en el boletín Focus señalan, además, una expectativa alcista para la cotización del dólar, hasta 2,55 reales (dos centavos más que lo previsto la semana anterior), cuando el pasado día 14 la moneda norteamericana cerró por encima de 2,6 reales por primera vez desde 2005
En tanto, la proyección sobre la evolución inflacionaria, medida por el Indice de Precios al Consumidor Amplio, subió de 6,4 a 6,43%, mientras la previsión de déficit en cuenta corriente (indicador que mide el desequilibrio de las cuentas externas) aumentó de 82 a 83 mil millones de dólares.
El casi estancamiento del PIB previsto por los analistas privados coincide con el recalculo realizado por el Ministerio de Hacienda, que bajó el viernes su proyección de crecimiento anual de 0,9 a 0,5%.
El gobierno también redujo de 3 a 2% su estimación de crecimiento para 2015 (los analistas privados estiman apenas 0,8%) y elevó de 5 a 6,1% su pronóstico sobre la inflación, en el mensaje elevado al Congreso para orientar la elaboración del Presupuesto general de la Unión.
Pese a la desaceleración, el ministro Guido Mantega afirmó la semana pasada que la economía brasileña volvió a crecer gradualmente en el segundo semestre: "inflación en baja, desempleo disminuyendo, aumento del crédito y buen resultado del comercio minorista demuestra que estamos en recuperación", y que 2014 no será un año recesivo, sostuvo.
Fuente: Télam
