A su vez, el ministro de Hacienda dejó en claro que no habrá ningún tipo de negociación con los bonistas o con los fondos que iniciarion juicios contra la Argentina. Sin embargo, según declaró una fuente de Wall Street, estos no se preocupan por la decisión y esperarán a negociar con el próximo gobierno.
El cálculo de Boudou indica que de los u$s25.000 M en bonos en default, sólo u$s5.000 M pertenecen a fondos buitres o a bonistas que le hacen juicio al país, mientras que los u$s20.000 M restantes están en manos de fondos o de personas que no entraron al canje de la deuda y que tampoco emprendieron acciones legales.
Ante este panorama, desde Hacienda consideran que si el 50% de los bonistas aceptan reestructurar sus bonos la operación habrá sido un éxito, publicó el diario Clarín.
Fuente: Infobae.com