Agregó que estas soluciones "hoy tampoco son compatibles con las condiciones de borde con que se provee energía en nuestro país tanto desde el punto de vista de los combustibles que se utilizan, las tecnologías involucradas y fundamentalmente quien ha sido el inversor en cada una de ellas".
El funcionario recalcó que "no debemos olvidar que quien invirtió o garantizo un flujo para la ejecución de la totalidad de las represas hidráulicas importantes de la Argentina fue el propio Estado".
"Plantear bajo falsa premisa de darle institucionalidad al sector eléctrico medidas como precios marginales, regularización de contratos de concesión, revisión de criterios físicos del abastecimiento, actualización de tarifas y de los períodos de gestión, es plantear la vuelta al modelo de los noventa, donde la industria no era el dato relevante a tener en cuenta y los excedentes eran exportados a precio vil, lo que provocaba rentas extraordinarias que se llevaban unos pocos en detrimentos de muchos", se explayó el funcionario.
El rol del sector energético en la Argentina es, para Cameron, fomentar "dentro de la racionalidad, la mayor competitividad para el desarrollo de las actividades económicas que garanticen el crecimiento del país, que es la única forma de posibilitar la inclusión social, el resto fue la implosión de fines del 2001 que por poco termina con nuestro país".
"En los últimos 10 años, con un crecimiento demográfico del 10 por ciento, la demanda de energía y combustibles de los hogares crecieron por encima del 80 por ciento y en el caso de la energía eléctrica por encima del 100 por ciento", detalló Cameron.
Explicó que "esto marca claramente que en el año 2003 existía una demanda excluida del sistema, porque el modelo neoliberal que defienden los especialistas del PRO dejó a la energía como un privilegio únicamente para los argentinos que pudieran pagarla en dólares, mientras se construían gasoductos y líneas eléctricas incompatibles con el sistema nacional para exportar energía a precio vil a países vecinos para que esa energía sea vendida en algunos casos a 20 veces su valor del otro lado de la frontera".
En consecuencia, el Secretario remarcó que "ese modelo energético neoliberal terminó con la catástrofe del año 2001 con 54% de pobreza, 25% de desocupación y la industria quebrada por falta de competitividad y el país en llamas".
Fuente: Télam