Por su parte, el Índice de Confianza de las Familias (ICF) subió en octubre 1,8 por ciento frente al mes anterior, y aumentó 0,2 por ciento en la variación interanual.
"En octubre, la confianza mostró una reacción de los índices, donde las familias ajustaron su situación presente en función de mejores expectativas de empleo e ingresos, en contraposición al ajuste negativo del mes de septiembre, pero manteniéndose en niveles relativamente bajos", evaluó.
El informe indicó que se evidenció en octubre una recuperación en las expectativas de ingreso que se incrementaron por ciento 2,7 por ciento, mientras que las perspectivas inflacionarias mejoraron en 2,1 por ciento, y las de empleo en 1,2 por ciento.
A su vez, las expectativas económicas aumentaron un 0,5 por ciento.
Por su parte, el porcentaje de familias con capacidad de ahorro en octubre ascendió 8,8 por ciento.
En cambio, las expectativas de ahorro se redujeron 1,9 por ciento, mientras que la intención de montos ahorrados se contrajo 2 por ciento con respecto a setiembre.
La tendencia de compra de bienes durables de las familias en octubre se ubicó en 8,5 por ciento, superior al 8,1 por ciento del mes anterior.
"El estímulo de la tendencia se centra en una recomposición de las expectativas de ingreso y empleo combinada con menores expectativas de ahorro", senaló.
Según detalló, la tendencia de compra de automóviles en octubre fue de 2,4 por ciento, el mismo nivel de setiembre.
A su vez, la intención de construcción de viviendas fue de 2,1 por ciento, levemente por arriba del 2 por ciento de setiembre.
En cuanto a la intención de compra de viviendas se ubicó en octubre en 1,3 por ciento, una décima superior a la del mes anterior.
"Octubre muestra un posible cambio de la confianza respecto a la tendencia observada a partir del segundo trimestre de 2012, dentro de determinadas características: Expectativas de ingreso acotadas, con tendencias de consumo estabilizadas en el corto plazo a menores niveles que a principios de ano", evaluó el informe.
El análisis concluyó indicando que "básicamente, el estímulo de la demanda en el cuarto trimestre se observa a partir de la estabilidad de empleo, junto a niveles de inflación persistente, compensada con menores tasas de ahorro".
