La facturación del último mes ascendió a $981,1 millones, acusando un singular incremento de 42,8% alentada por la vocación de muchos consumidores de renovar sus televisores para ver el campeonato mundial de fútbol.
Y si bien contribuyó al impulso de las ventas las notables campañas promocionales, en particular las encaradas por emisores de tarjetas de crédito parece exagerado que el Indec haya estimado una deflación de 0,1% en el promedio de productos que ofrecen las cadenas comerciales y suba de sólo 6,2% en los últimos doce meses.
Con un ajuste de precios del orden de 22% como estima el consenso de las consultoras privadas, el aumento real de ventas del conjunto de los shopping se atenúa a un nada despreciable 17 por ciento.
Fuente: Infobae