Así lo confirmaron desde el ministerio de Economía a Télam, quienes indicaron que si bien el objetivo primario es "canalizar recursos ociosos", atrayendo dólares destinados a la inversión que se encuentren fuera del sistema, también podrán suscribir un bono quienes tengan dólares declarados en sus cuentas bancarias, ya sea en el país o en el exterior.
El proyecto de ley, que lleva la firma del Jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y del ministro de Economía, Hernán Lorenzino, contempla la creación de tres instrumentos.
Estos son: un Bono de Ahorro para el Desarrolllo económico (Baade); un Pagaré, que en realidad es una adecuación del Baade para inversores institucionales, y un certificado de depósito para inversión (Cedin).
Mientras que los dos primeros están destinados a apuntalar la "infraestructura y el sector energético", el Cedin está destinado a reactivar el mercado de la construcción.
El Baade "es un bono con vencimiento de capital en 2016, que rendirá una tasa de interés anual del 4%, la cual será pagadera en forma semestral por el equivalente al 2% del capital exteriorizado", explicó a Télam el secretario de Finanzas, Adrián Cosentino.
Este instrumento tendrá una versión registrable y una cartular o al portador, "lo que significa que quien exteriorice deberá elegir la opción que le resulte más conveniente", agregó el funcionario.
Quien opte por la versión registrable estará obteniendo un título como cualquier bono soberano existente en el mercado.
Por otra parte, "quienes opten por la versión cartular, tendrán posesión de un instrumento libremente transferible y para cuyo cobro deberán acudir al Banco Nación, única institución bancaria habilitada para su suscripción y cobro", se explayó.
El texto girado al Senado contempla que "este bono, tanto en su versión cartular como registral, pueda ser emitido en una versión pagaré, como es el caso de otros bonos soberanos en circulación".
Según Cosentino, esta opción puede resultar más conveniente para determinados perfiles de inversores institucionales, como aseguradoras y bancos, que necesitan este tipo de instrumentos para sus registros contables.
"Quienes opten por los Pagaré, contarán con la posibilidad de convertirlos, a partir del año, a su versión título público en cada fecha de pago de los respectivos cupones semestrales", precisó.
"Las distintas fisonomías previstas de emisión del Baade (ya sea en bono o pagaré) responden al objetivo de otorgarle a este activo mejores condiciones de adaptabilidad a los requerimientos del inversor, en términos de circulación, transparencia, liquidez y flexibilidad de aplicación", explicó el funcionario.
En tanto, los Cedin serán suscriptos solamente por quienes deseen exteriorizar capitales, y los fondos tendrán el fin específico para la compra de viviendas nuevas, usadas, para refaccicón y ampliación, entre otros.
Los Cedin tendrán una estructura similar a la de un cheque cancelatorio, ya que serán emitidos por los bancos y serán endosables y al portador.
El Banco Central respalda la totalidad de los depósitos contra los cuales se entregan los Cedin (es el equivalente a un encaje de 100%, cuando el encaje obligatorio para los depósitos comunes en dólares es 20%), y el certificado está sólo destinado a "ahorristas" que blanqueen capitales y quieran invertirlo en el mercado inmobiliario, y tendrán un mercado secundario debido a las características de transferibilidad del instrumento.
El viceministro de Economía, Axel Kicillof, aclaró que el Cedin podrá ser adquirido en pesos en el mercado secundario.
"Entre que el CEDIN se emite, porque se hizo la primera transacción -a través de la exteriorización- y el CEDIN se convierte nuevamente en dólares y se extingue, puede haber una cantidad ilimitada de cambios de mano del instrumento", completó.
"El que vende un inmueble puede ir con el CEDIN (que recibió por la venta) y comprar otros inmuebles o vendérselo a otros, y no sólo (puede comprar) inmuebles usados o para la construcción de nuevos, también se pueden utilizar para ir al corralón de materiales, usar para comprar terrenos", explicó.
"Estamos poniendo liquidez y agregando un instrumento a un mercado inmobiliario que venía trabado por los movimientos especulativos del dólar ilegal. Partiendo de una realidad de 50 años de bimonetización argentina, lo que tratamos de hacer es darle una salida productiva a este problema y seguir avanzando en el crecimiento del país", señaló Kicillof en una entrevista con radio Continental.
Fuente: Télam
