Algunos en la plaza porteña ya suponen que en Economía se estudian medidas para evitar que su cotización perfore la barrera de los 3,30 pesos.
Las pizarras siguieron ajenas a las recientes flexibilizaciones cambiarias y la divisa estadounidense profundizó su retroceso con cinco centavos (1,49 por ciento) a 3,25 pesos para la compra y 3,30 para la venta.
La oferta de divisas sigue resultando muy superior a la demanda y como resultado de esa ecuación el Banco Central terminó llevando a sus reservas 128,4 millones de dólares. (Télam)