El déficit del sistema de jubilaciones está previsto que llegue a los 21.000 millones de euros en 2020, y en un intento de equilibrarlo, el Gobierno apostó además por aumentar los aportes salariales y patronales.
La reforma no toca la edad legal de jubilación, que durante la presidencia del conservador Nicolas Sarkozy se incrementó en dos años, hasta los 62.
Con el fin de que los jubilados aporten también a las arcas del Estado para reducir el déficit, el plan prevé que la revalorización anual de las jubilaciones no se aplique cada 1 de abril, sino desde el 1 de octubre, lo que proporcionará, según el Gobierno, unos ingresos de 1.400 millones de euros en 2020.
El plan de reforma fue anunciado el pasado agosto tras la concertación con las centrales patronales y sindicales, que posteriormente convocaron una jornada de protesta, el pasado 10 de septiembre.
La protesta tuvo esencialmente un carácter simbólico por su discreto seguimiento y por ser la primera del nuevo curso político, y a ella acudieron los sindicatos CGT, FSU, FO y Solidaires, para los cuales el peso de las medidas anunciadas por el Ejecutivo va a recaer en los asalariados y los jubilados.
Fuente: Télam