Del evento participó el ministro de desarrollo de Noruega, Heikki Holmås; el jefe de Gabinete del ministro de finanzas Alemán, Ludger Schuknecht, y Yuefen Li, de la UNCTAD.
El encuentro fue coordinado por Eric Le Compte, de la ONG Jubileo USA, que pregona una condonación de deuda a los países más vulnerables para que puedan salir de su condición de pobreza.
Cosentino disertó ante alrededor de 700 asistentes, entre los que se encontraban representantes de ONG, inversores y directivos de entidades financieras.
La exposición de Consentino fue destacada por los asistentes, quienes destacaron la posición argentina por ser una "voz alternativa" en medio de la actual crisis internacional.
Segan Anak Degan, referente de la ONG Bretton Woods Project, dijo que fue "una clase magistral" debido a que "Argentina es una voz alternativa cada vez más escuchada, debido a la crisis de deuda que vive Europa".
Se trata de un hecho destacado de que un funcionario argentino exponga las bondades de la solución argentina al problema de deuda soberano, comparado con la situación que se vivió en esta misma Asamblea hace nueve años atrás en Dubai, cuando la Argentina era mirada con desconfianza e ignorada por los grandes bancos de inversión a causa del default.
Cosentino expuso "la paradoja que se da, que es la de haber logrado un proceso de restructuración de deuda exitoso con 93% de participación, y no obstante, la Argentina tiene que seguir lidiando con lo holdouts, y no puede terminar de dar vuelta la página".
En ese marco, los expositores coincidieron en la necesidad de crear un mecanismo para el tratamiento de las deudas soberanas, al subrayar el vacío legal que existe en la arquitectura financiera internacional.
A su turno, el alemán Schuknecht alertó sobre "la conducta cíclica de los fondos de inversión" en momentos de liquidez como el actual, que agrava el problema de los países endeudados.
Este concepto generó cierto resquemor en los inversores presentes en el encuentro, que defendieron su posición a la hora de destinar los recursos que administran.
Cosentino enfatizó que "para la Argentina es decisión soberana no salir al mercado, tras haber recuperado soberanía con la política de desendeudamiento".
"Es un activo que tenemos los argentinos de no depender de la volatilidad de los mercados", subrayó.
En paralelo, los popes de la banca de inversión internacional organizaron un "contra foro" con una tónica más hostil con la Argentina, en el Tokio Palace Hotel, donde expusieron también sobre la cuestión de la reestructuración de deuda soberana.
El mismo estuvo organizado por el IIF, cuyo mayor exponente es Charles Dallara, negociador del canje griego y ex funcionario del Tesoro de Estados Unidos durante la época de George Bush padre y Ronald Reagan.
Dallara rechazó la propuesta de canje de deuda de argentina del 2003 y se mantuvo firme en su posición, pese a la crisis internacional y la operación griega, que a la postre tuvo una quita de deuda mayor a la de nuestro país.
En contraposición a la postura de las ONG, lo que buscan estos banqueros, -donde se congregan los popes del Citi, el HSBC, el Deutsche, entre otros- es precisamente evitar que la crisis de deuda derive en soluciones para los países como lo hizo la Argentina.
En este sentido, enfatizan el uso de la cláusulas de acción colectiva para poder cambiar condiciones de los bonos con la voluntad de las mayorías.
En dicho foro disertó un archienemigo de la Argentina, el acreedor Hans Humes, del fondo de inversión de riesgo Greylock, y ex co-líder del Comité de Acreedores de Bonistas en default de la Argentina, que se negó a ingresar en el canje de deuda del 2005 y que luego modificó su posición en 2010.
"La Argentina no negoció con el comité de acreedores", se lamentó Humes, quien insistió que la propuesta de canje fue de "mala fe".
Humes, en su exposición, no mencionó su ingreso al canje de deuda en 2010, que permitió elevar al 93% el nivel de adhesión de parte de los tenedores de títulos.
También participó del foro de inversores y banqueros David Mulford, vicepresidente del Credit Suisse, y amigo declarado del ex ministro Domingo Cavallo.
Mulford fue citado a declarar por la justicia argentina -incluso ya se solicitó ayuda a Interpol- por su actuación en el negocio del Megacanje.
Mulford se enfocó en el tema de los acreedores privilegiados como los organismos multilaterales, que tienen privilegio de cobro, antes que los privados. Como ejemplo citó el caso griego y no hizo mención al argentino.
En este seminario, que fue presenciado por alrededor de quinientas personas, participó también como expositor el titular del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, quien se mostró predispuesto a una charla con inversores, en pleno tiempo de descuento por el cierre de la campaña electoral presidencial.
Fuente: Télam
