"Esta situación genera una clima favorable para la posición de Argentina, que ha hecho una oferta muy generosa, ofreciendo pagar lo mismo que a los otros acreedores", consideró Ferrer en declaraciones radiales.
Para Ferrer, "la posición de Argentina es correcta si (los fondos buitre) aceptan, o si no aceptan, o no cobrarán nunca", debido a que "el problema no son los buitres, sino definir las cuestiones internas y podemos sobrevivir indefinidamente con ese tema pendiente, que conviene hacerlo pero con límites razonables".
Consideró también que "Argentina tiene mucha capacidad de maniobra y será mucho más fuerte mientras más fuerza y capacidad de maniobra tenga puertas adentro".
El nuevo documento aprobado ayer plantea como primer principio, que los estados soberanos tienen "el derecho de diseñar sus políticas macroeconómicas, incluyendo la reestructuración de su deuda soberana, la cual no debe ser frustrada o impedida por ninguna medida abusiva".
"La ONU pretende dar un marco razonable y equitativo para que un país cuando deba estructurar su deuda se vea como se puede hacer", expresó Ferrer, quien evaluó al caso argentino como paradigmático.
Estos principios, según el economista, harían que el nuevo sistema "sería como una quiebra internacional, se haría un convocatoria de acreedores y se acepta lo que decide la mayoría", lo que les permite tener soberanía.
Sobre este punto, Ferrer detacó que "la soberanía es fundamental, nunca los países deben estar sometidos a decisiones extranjeras como le está pasando a Grecia, la democracia griega casi no existe, la decisiones las toma la Troika".
Fuente: Télam