"No podemos stockear autos, así que si las trabas de ventas a Brasil se mantienen, habrá que parar las líneas de producción", remarcó el ejecutivo e una empresa en declaraciones que hoy publica diario Clarín.
El freno brasileño es para autos y no para camionetas, por lo que no alcanza a todos los vehículos que se exportan a ese país, pero sí a gran parte.
Este problema generó también preocupación en la Unión Industrial Argentina (UIA), luego de que las automotrices fueran la base para el crecimiento en marzo.
En ese sentido, el sector industrial tuvo un alza del 10,3 por ciento, según datos difundidos por la UIA, y el motor de esa suba fue por las automotrices, que registraron un aumento del 33 por ciento. (Infobae)