El índice industrial Dow Jones también se resintió por los cimbronazos políticos del Viejo Continente y cerró con una pérdida del 0,93%, en tanto que el Nasdaq, de valores tecnológicos, se hundió aún más, 1,51%.
Los operadores de la Bolsa de Nueva York dijeron que esta sufrió por la preocupación que ha generado el deterioro político del gobierno del presidente español, Mariano Rajoy, quien enfrenta un difícil situación por el estallido de un caso de corrupción que afecta a la cúpula de su Partido Popular en el poder.
Mientras tanto, el conjunto de las acciones europeas registraron un agudo desplome, directamente afectadas por España y también por el avance en las encuestas electorales del ex primer ministro Silvio Berlusconi, quien podría regresar al gobierno, una eventualidad que no es del agrado de los mercados.
Así, el índice FTSE de la Bolsa de Londres perdió hoy un 1,58%, una de las caídas menos pronunciadas dentro de los grandes mercados europeos.
Esto es así cuando se compara con el cierre en baja del 3,01% del índice CAC de la Bolsa de París, o el retroceso de un 2,49% del índice DAX de la Bolsa de Frankfurt.
La mayor caída la sufrió el MIB de la Bolsa de Milán, que cerró 4,50% abajo, seguida en la "lista negra" de la jornada por Madrid, cuyo índice IBEX35 perdió un 3,77%, poniendo fin así a todas las ganancias que había obtenido a lo largo del primer mes de este año.
Amsterdam, por su parte, cayó un 1,65%, Estocolmo un 1,27% y Zurich, que fue el mercado menos afectado, un 0,78%.
En el Lejano Oriente, los resultados fueron mixtos ya que el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio subió un 0,62%, en tanto que el Hang Seng de Hong Kong se dejó un 0,16% y en Sydney la Bolsa perdió un 0,28%.
Otro elemento que también puede ser tomado en cuenta como reactivador de la crisis en Europa son las declaraciones formuladas el pasado fin de semana por el ministro de Economía de Francia, Pierre Moscovici, quien consideró que el euro cotiza demasiado alto.
Moscovici dijo que "el euro está fuerte, quizá demasiado fuerte", en una clara alusión a cómo esto está afectando a las exportaciones francesas y europeas, lo que también algunos leyeron como una subyacente demanda de que la moneda única se deprecie.
Hoy, en el marco de las caídas bursátiles generalizadas, el euro perdió un centavo, cerrando a 1,3564 dólares por unidad, después de haber llegado el pasado viernes a su punto máximo en los últimos 14 meses frente a la moneda estadounidense.
Por otro lado, hoy se supo que los nuevos pedidos recibidos por las fábricas estadounidenses crecieron en diciembre menos de lo esperado y la lectura del mes anterior fue rectificada a la baja.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos dijo que los pedidos a las fábricas aumentaron 1,8% en diciembre, contra las previsiones de un incremento de 2,2%.
En las últimas semanas, una serie de datos económicos han apuntado a una modesta recuperación en Estados Unidos, aunque no han sido lo suficientemente fuertes como para alterar las expectativas de los inversores sobre que la Reserva Federal dará continuidad a su política de expansión monetaria.
Fuente: Télam