El FMI intensificó los vínculos con Argentina desde el gobierno de Arturo Frondizi, a partir de su respaldo a su plan de estabilización de 1958. El programa fracasó y derivó en el derrocamiento del presidente radical intransigente y en la crisis política y económica de fines de 1962.
Cuatro años después, el Fondo avaló el plan económico de Adolfo Krieger Vasena, ministro de Hacienda del gobierno militar del general Juan Carlos Onganía (1966-70), pero el acuerdo derivó en otro fracaso.
Durante la última dictadura militar, a fines de los ´70, el FMI volvió a respaldar un programa económico argentino, esta vez aplicado por el ministro de Economía José Alfredo Martínez de Hoz. También entonces el proceso derivó, en 1982, en una de las peores crisis económicas.
En los últimos 15 años, desde 1987, se firmaron siete acuerdos con el Fondo, de los cuales sólo uno fue cumplido y fue necesario pedir 18 perdones (waivers) formales al directorio del organismo Las cifras fueron reveladas por el actual ministro de Economía, Roberto Lavagna.
Un total de 44 metas que Argentina se fijó no fueron cumplidas. De ellas, 29 fueron metas cuantitativas, 7 plazos de metas cuantitativas, 6 metas estructurales y 2 metas estructurales de cumplimiento continuo sin concretar.
El último OK del Fondo fue para el plan de Convertibilidad del ministro de Economía, Domingo Cavallo, durante la presidencia de Carlos Menem, al cabo otro programa económico avalado por el Fondo que fracasó y derivó en la crisis económica de los últimos tiempos.
El último acuerdo, de fines del año 2001, duró apenas unas pocas semanas. (Télam)