En este ámbito de consultas, los profesionales en Economía explicaron al titular de la cartera productiva sobre los aspectos técnicos puntuales en los que el Consejo se puede expedir y que, sobre todo, tienen que ver con los términos específicos relacionados a la factibilidad legal en la elaboración del estatuto de la entidad. Asimismo, la Comisión de Economía del CPCE, dejó aclarado que las decisiones políticas sobre esta iniciativa productiva que involucra a varios municipios de los departamentos El Alto, Santa Rosa, La Paz y Ancasti, le corresponderán solamente al señor ministro.
En tanto, la Comisión trabajará con este proyecto productivo sobre la factibilidad técnica también, en base a la información suministrada por el Ministerio involucrado, en términos de rentabilidad, factibilidad y sustentabilidad.
En la misma oportunidad mediante comunicación telefónica, el Presidente del CPCECa, CPN Luís Néstor Segovia, se comprometió con el ministro Bellón a aportar ideas respecto a la forma de financiar dichos proyectos, que según la opinión del Presidente no habría impedimentos para ser financiados en su totalidad o parcialmente con fondos de Regalías Mineras administrados por la provincia y los municipios, siempre y cuando esa sea la voluntad política del gobierno provincial y de los intendentes municipales.-
Cuenca caprina del Este
El proyecto de “Mejoramiento de la Cuenca Caprina del Este Catamarqueño” tiene por objetivo mejorar la calidad de vida de las personas que utilizan a la producción caprina como instrumento de subsistencia y expansión de sus vidas, y que en la mayoría de los casos involucra a familias completas.
Este objetivo determina la escala de intervención que las instituciones públicas, IMDEC y Gobierno Provincial comprometidos oportunamente en el proyecto, deben abordar si es que desean facilitar la mejora propuesta. Esta escala se corresponde con inversiones por productor, mínimas y necesarias, para llegar en un plazo de cuatro años a las “250 cabras por productor con una producción de 400 cabritos/as por año”.
La producción así generada, y en caso de que se puedan vender bien los cabritos, aportará los ingresos económicos suficientes para que las familias campesinas dedicadas a la ganadería caprina, alcancen el primer escalón del progreso y una vez allí, impulsarse por si mismos, a otra escala mayor de negocio.
El Proyecto contempla que en entre el productor y el cliente que consume el cabrito, existe una intermediación no formalizada, estacional y carente de una estrategia de desarrollo de productos con mayor valor agregado. Y que si el sector comercial desarrollara una estrategia de producto, las ganancias obtenidas no quedarían en la región y menos aún en manos del ganadero caprino, ya que el cabrito sale en pie de la región productora del IMDEC.
Frente a esta realidad industrial y comercial, el proyecto propone, además de la intervención intrapredial con inversión en campo y capacitación del ganadero, la compra del Frigorífico Ancasti como instrumento corrector de las distorsiones anteriormente planteadas.