Las tres abstenciones fueron de legisladores del gobernante Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok), a quien se los separó inmediatamente del bloque oficialista por orden del premier Yorgos Papandreu, mientras los partidos Nueva Democracia (conservador), el Kke (comunista) y la izquierda radical de Syryza votaron en contra.
Mientras los legisladores debatían, cerca de 10 mil personas se manifestaban en las afueras del Parlamento en repudio del controvertido plan que habilitará la ayuda financiera, pero implicará drásticos recortes en el gasto público, focalizado en el recorte de pensiones, salarios de funcionarios y otros beneficios sociales, adamás de la suba de varios impuestos.
Poco después de conocida la votación, la policía debió dispersar a centenares de manifestantes que protagonizaron violentos incidentes en las calles aledañas al Parlamento.
Las imágenes de la televisión mostraron las calles de Atenas llenas de nocturnas fogatas, carros lanzaaguas y policías anti-disturbios que intentaban poner orden en medio de las violentas manifestaciones.
Cientos de personas desplegaron una cinta negra alrededor del Parlamento, en recuerdo de las tres personas muertas ayer durante una violenta protesta, cuando se incendió un banco por las bombas molotov que arrojaban los manifestantes.
La policía ateniense pidió hoy reforzar con casi 2.500 efectivos de provincias a las fuerzas en la capital, en un intento por evitar que se repitan los enfrentamientos, informó la agencia de noticias DPA.
Antes de la votación, el primer ministro Giorgos Papandreu interpeló en un emotivo discurso a los parlamentarios a quienes exhortó a apoyar la medida pues "O votamos por la ley o el país se va a la bancarrota", dijo, tras enfatizar que eso "no lo permitiremos. Haremos todo lo posible por que el país no quiebre".
Papandreu viajará este viernes a la cumbre extraordinaria sobre Grecia que los jefes de Estado y gobierno de los 16 países de la eurozona celebrarán en Bruselas.
En tanto, continúan las investigaciones sobre las tres muertes en la sucursal bancaria, cuyas cámaras de seguridad mostraron imágenes de cómo un encapuchado rompe primero los cristales del banco con un martillo y luego otros tres hombres con capuchas lanzaban cócteles molotov al interior del edificio.
Numerosas personas dejaron hoy flores y velas encendidas delante del banco en el que dos mujeres, de 32 y 35 años, y un hombre de 36, todos ellos empleados de banca, murieron al quedar atrapados en la filial bancaria incendiada. La mujer de 32 años estaba embarazada de cuatro meses.
Los tres intentaron ponerse a salvo en la parte alta del edificio de cuatro plantas, pero inhalaron gases tóxicos y sufrieron un desvanecimiento cuando huían.
Fuente: Telam