Como prosecución de las medidas de acción directas que propuso la CONADU HISTÓRICA en su último congreso, se cumplió ayer contundentemente la primera jornada de la segunda huelga programada para este cuatrimestre. Mañana se concretará la segunda jornada de éste paro, y el viernes 8 los dirigentes sindicales se reunirán por primera vez con el nuevo Secretario de Políticas Universitarias Alberto Dibbern. La gremial docente pondrá sobre el despacho del nuevo titular de la SPU todos los reclamos de este sector, haciendo centro, dijeron, en el tema jubilaciones tan en boga por estos días, pero que constituye un reclamo tan añejo como eludido. Una jubilación del 85% móvil para todos los trabajadores de las Universidades Nacionales, es el eje de nuestros reclamos en este segunda etapa de protestas. Ya se explicó oportunamente que la jubilación constituye la sustitución del salario mensual activo, por lo que el reclamo sustancial de una mejora salarial en este momento, es al mismo tiempo el reclamo de un mejor haber jubilatorio para el futuro de los trabajadores docentes, explicaron desde el GDU. Para eso es que la primera medida que esperamos los docentes del nuevo titular de la SPU, es que reanude las relaciones con nuestro sector, convocando nuevamente la mesa de negociación por el salario, y reconozca mínimamente los acuerdos alcanzados con los anteriores responsables de la mencionada Secretaría, disparó el dirigente José Luis Molina
Hoy se cumplirá la segunda jornada de este paro programado por 48 horas, que además de los reclamos citados, también insiste en la triplicación del presupuesto universitario, y en exigir al gobierno, asalariar a los mas de 35.000 docentes ad-honorem que en muchos casos, mantienen la educación pública, comunicaron desde la gremial docente.
Es conveniente aclarar que los últimos ofrecimientos del gobierno por mejorar la situación, tanto como el 19% de incremento a la masa salarial como los 140millones de pesos de refuerzo al presupuesto universitario, son considerados insuficientes por las organizaciones sindicales, que evaluaron las ofertas y diagnosticaron que “no alcanzan a solucionar aunque sea mínimamente, el reclamo salarial de este sector”.