"La utopía es una cosa fundamental para poder vivir. Hay que tenerla siempre", arengó Ascaride en una entrevista que mantuvo con Télam en España, en referencia al sueño de un mundo más justo, libre y solidario que ella comparte, tanto en la ficción como en la vida real, con el director, el guionista y los personajes de la película.
Ascaride y Guédiguian, su esposo y director de la mayoría de las películas en las que trabajó, como "Marius y Janette", "A todo corazón" y "La ville est tranquile", componen un equipo de trabajo que siempre filma en locaciones de la ciudad francesa de Marsella, tratando temas populares y sociales. (Télam)