"Ante los cinco sentidos de cualquiera que los tenga exactos, sus comentarios no serán más que un alarde melancólico, visceral y resentido de alguien al que sólo le queda hablar", escribió en una carta publicada por Clarín.
Arjona, quien el año pasado hizo una exitosa y larga gira por escenarios de Argentina, respondió así a declaraciones publicadas la semana pasada por el mismo periódico y en las que Páez señaló al cantautor guatemalteco como uno de los símbolos de la "aniquilación cultural" que a su juicio padece el país.
"Si la ciudad (Buenos Aires) le da 35 estadios Luna Park (llenos) a Arjona y a Charly García le da dos (N de R: en realidad serán tres con el agregado del 3 de abril), tienes que pensar qué significan la política, los diarios en esta ciudad, en la que hay valores que fueron aniquilados", había declarado Fito en una entrevista con el mismo medio.
El cantautor guatemalteco sostuvo que "de forma sospechosa" el músico argentino "menciona el inicio de este problema en su país casi de manera simultánea con el descenso claro de su capacidad artística".
"Puede ser que usted mismo se crea su farsa de intelectual osado, pero detrás de su arrogancia habita el irrespetuoso dictador de creerse dueño de las decisiones populares", le advirtió.
A continuación, gran parte de la carta que envió Arjona: "El señor Fito Páez habla de aniquilación cultural y me menciona. De forma sospechosa señala el inicio de este problema en su país casi de manera simultánea con el descenso claro de su capacidad artística (...). Es de una belleza épica el pánico que le representa entregar un nuevo trabajo musical a su propia gente (...). Puede ser que usted mismo se crea su farsa de intelectual osado, pero detrás de su arrogancia habita el irrespeto dictador de creerse dueño de las decisiones populares. La música no pertenece a las competencias de atletismo donde se miden las capacidades contra reloj, es un asunto de gustos y de emoción. Ante los cinco sentidos de cualquiera que los tenga exactos, sus comentarios no serán más que un alarde melancólico, visceral y resentido de alguien al que sólo le queda hablar".
"Ya quiso usted ser Charly García, después quiso ser (Pedro) Almodóvar. Lamentable lo suyo señor. Lamentable.", remató ofuscado. ¿Cómo terminará todo?
Fuente: Primicias Ya