El artesano, profesor de matemáticas, es el encargado de trabajar la madera y junto con la fiel compañía de su esposa -quien lo acompaña en su labor- recorrieron diferentes ferias artesanales que se realizan en distintos puntos del país. El hombre comentó a Diario C, que es la primera vez que participan de este evento, “recorrimos muchas ferias, pero como esta no vimos otra igual”, destacando así la fiesta artesanal del poncho.
El profesor de matemáticas, le informó a Diario C, que siempre tuvo afinidad con la madera y comenzó a trabajarla. En sus primeros pasos, tanto el como su esposa empezaron a realizar entre otras producciones, muñecos. Hasta que de tanto andar, compenetrarse en el mundo del arte, del talento, de la maestría de llamar la atención formando figuras con todo tipo de material, la madera en este caso particular, el artesano le hizo caso a su propia profesión, el de matemático, y comenzó a tallar juegos perspicaces.
“El trabajo del docente, es hacer que la juventud aprenda a pensar y como soy profesor de matemáticas, y generalmente trabajo con adolescentes, comencé a ejecutar juegos de ingenio, porque nuestro objetivo es que aprendan a pensar”, remarcó el artesano trayendo consigo, además de su arte, este importante mensaje.
En consecuencia, el profesor explicó que uno de los juegos más difíciles y a su vez el más atrayente, es el denominado columpio. Es una pequeña madera, que tiene dos aberturas, una al lado de la otra. Por ambas partes atraviesa un lazo y al final de cada lazo se encuentra una bolilla de madera. El juego consiste nada más y nada menos que las bolillas queden juntas en un solo lazo.
La invitación está hecha, los juegos a la vista de todo el público, los artesanos incitan a que los jóvenes, sobre todo los niños, se animen a buscar la forma de descifrar cada juego, o mejor aún, a buscar la manera de “pensar” jugando.
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Por: Sergio el 21-07-2010 a las 17:24