En una carta enviada a todos los medios de comunicación, Piazza rememoró sus comienzos de la mano de la Legrand y develó su lado de la historia. “Es mucho lo que sé de ella, lo que conozco de ella, lo que viví junto a ella y sé lo que ella canjeó. ¿Te acordás cuando Eva Montes de Oca me pedía plata para sentarme a comer con vos para ayudarme en mi carrera?
No es mi madrina y nunca lo fue. Eso sólo fue una manera romántica de disfrazar un canje. Una vez allá lejos por el año 1982, ella me dijo: “Yo te presento, una por una, a cada persona importante y vos tenés que darme un vestido por cada una de ellas”. ¡Aún lo tengo grabado en mi memoria como un canje conveniente!”
Asimismo, el modisto no puedo dejar de referirse a la desgraciada pregunta que Mirtha le hizo una vez durante uno de los famosos almuerzos: “Si vos, Roberto, adoptaras un chico, ¿no habría problemas de violación?”.
“Ese día me callé. Ese mediodía llegué a casa, me amargué, lloré y callé para que no digan que genero polémicas. Pasó a la historia de las estupideces televisivas, con sorna, premeditación y alevosía… Me hartó su soberbia, su personalidad de señora de bien y que se crea una dama de la sociedad.
No existís más, ni para mí ni para muchos. Sos realmente, sin pelos en la lengua, una actriz que tuvo poco éxito de actriz y mucho de comida en televisión. Lejos quedó esa imagen que la gente se creyó de vos. Lo lamento, retiro mi amor hacia vos, mi afecto, mi perdón...” remató Piazza. ¿Qué dirá Mirtha?
Fuente: minutouno.com.ar