El tenor españo actúó junto al Coro estable del teatro Colón, la orquesta de la fundación Beethoven bajo la dirección del estadounidense Eugene Kohn y la soprano argentina Virgina Tola.
El comienzo de la presentación tuvo que retrasarse unos minutos por la cantidad de gente que todavía quería tomar su ubicación frente al escenario. Entre las 22 mil localidades sentadas, se ubicaron empresarios, artistas, embajadores y distintas personalidades que siguieron atentos el show de Plácido Domingo desde las primeras filas.
Cuando promediaba su presentación, el tenor español se dirigió al público: "Estamos emocionados por la respuesta que hemos tenido. No se ve hasta donde hay público", dijo antes de ponerse al mando de la orquesta del teatro Colón antes del intervalo del show.
Para la segunda parte, Plácido Domingo entonó "Rigoletto" y "Aída", de Verdi, pero además se dirigió al público: "Hemos tenido una relación verdaderamente de amigos con los músicos. Con los años he llegado a conocerlos (...) Además de esas columnas que hay en el gran Teatro Colón, hay muchos personas. Traspasan las 900 personas que trabajan en ese teatro y todos ustedes tienen que estar orgullosos. Tienen un teatro que pueden presumir de él".
Más tarde, sonaron "Maravilla" de Federico Moreno Torroba, "Doña Francisquita" de Vives y ·La del manejo de rosas" de Pablo Sorozábal, entre otros, que el público escuchó respetuosamente -como a lo largo de toda la presentación- y aplaudió de pie cuando finalizaron.
En el turno de los bises, el tenor español ofreció más de nueve piezas entre las que se destacaron los tangos "Volver", "El día que me quieras" y "Mi Buenos Aires querido".
Antes del cierre, Plácido Domingo regaló al público la canción que todos querían escuchar, "Granada", un clásico de su repertorio.
Con cerca de tres horas de show, el tenor pasó por Buenos Aires y repartió cultura con su voz. (Infobae)
