(DIARIOC, 25/02/2011) El teléfono suena en la recepción de un hotel de Punta del Este.
Sin demasiado preámbulo una señorita pasa la comunicación a la habitación 007, y atiende una voz adolescente ("Mamáaa -llama con un grito-, mientras de fondo se oye una transmisión de fútbol por televisión). Es Bautista, el hijo de Reina Reech, la flamante directora artística de "La Revista de Buenos Aires" uno de los referentes del género en la cartelera porteña estival, que continúa en marzo- que tuvo buenas críticas, y donde la rubia puso en marcha sus propias ideas, tanto en las coreos como en el diseño y en el vestuario.
Y, como buena diva, ella tarda varios minutos en tomar el tubo y comenzar la entrevista que ya estaba pautada de antemano por su agente de prensa.
Sucede que Reina está de vacaciones, descansando del agitado 2010 que quedó atrás, tan atrás como la cantidad de horas que pasó en los estudios de Ideas del Sur mientras cumplía su rol de jurado en "Bailando por un sueño". Ahí mismo, donde transcurrían agitadas peleas entre los participantes y quienes compartían su lugar (Pachano, Alfano, Fort, Barbieri, Moria y Polino).
Un verdadero "todos contra todos" que repercutía diariamente en varios de los programas de tevé, con móviles, tapes y opiniones de mediáticos varios... Debe haber sido agotador, sin duda (aunque ella evita ahondar en el tema y mezquina detalles).
"Es que fueron cinco años en showMatch, y la verdad es que este año decidí bajar un cambio y poner mis energías en otra cosa", dice, y corta la frase...
"Imaginate, trabajé como actriz, bailarina, coreógrafa, productora, grabé siete discos y vendí muchísimos. Ya creo que hice todo lo que pude haber hecho y bueno, lo que pasó es que sentí una necesidad personal de abrir otros espacios en mi carrera", continúa, cuando desde el otro lado de la línea, esta cronista trata de que el clima se relaje y se transforme en un diálogo ameno, de unos 15 minutos en promedio. Pero ella es Reina, está de vacaciones y denota un resabio de ese cansancio que le trajo 2010, con tantos noteros de otros tantos programas llamándola y preguntándole sobre todo lo que pasaba en el "Bailando".
"La verdad es que en ShowMatch tenés un trabajo de diez horas semanales en el aire y, quieras o no, estás siempre en el epicentro de las noticias. Si bien en estos años pude dirigir algunos espectáculos, estar ahí me requería mucha dedicación", cuenta (a secas).
¿Y cuáles son esos espacios que decidiste abrir? ¿Algo de cine, algo de televisión?
_Sí. Estoy retomando varios proyectos personales que habían quedado relegados todo este tiempo. Entre ellos, una película que tenía en carpeta hace más de dos años, escribí un programa infantil para televisión y el guión para una ficción juvenil. Entonces, este año empecé a poner en marcha todo eso, lo cual implica reuniones para conseguir financiación (sobre todo para la película), coordinar la producción, negociar los espacios y los horarios con los canales. Para todo eso tenés que estar a full. Aparte yo no tengo ni padre ni marido ni nadie que esté atrás mío respaldándome.
¿Pero no es mejor ser independiente?
_Yo siempre fui independiente pero hay quienes siempre tienen alguien atrás. No es mi caso.
¿Vas a incluir a alguno de tus hijos en los proyectos que estás llevando adelante?
_No, no están pensados para ellos.
¿Qué pensás del cambio que está teniendo la televisión al incluir tanta ficción en el prime time?
_Todos los años hubo lugar para la ficción. No sé. Lo que he visto mientras estuve en Buenos Aires me encantó. "Los únicos", "Un año para recordar". Con Carla (Peterson) hicimos "Lalola", está espléndida. "El elegido" también está muy bien.
{adc}
_¿Te gustaría volver a actuar o conducir?
No, no tengo ganas.
Ok Reina. (La Razón)