El tiempo pasó pero el grito de "¡Abrióooo!" y el saltitoque daba Soldán cada vez que un estudiante daba con la llave correcta para el cofre de la felicidad hizo del programa un clásico. "De algún modo, sigo haciendo ´Feliz domingo´, con el ping - pong de preguntas y respuestas, el repechaje, el cofre de la felicidad y el saltito", contó Soldán a la revista Paparazzi.
La explicación es sencilla, según el conductor: "Me encargan la animación de fiestas empresariales o familiares y hago jugar a los invitados con los distintos segmentos. ¡Una cosa fantástica!", resumió, con su eterna sonrisa y optimismo.
Fuente: m1nutouno.com.ar