El accidente, el peor en la década en este país, abrió un debate sobre las condiciones laborales de los mineros en los yacimientos medianos y pequeños, que no siempre disponen de la seguridad adecuada.
"Esta es una zona muy rica en minería, pero no siempre ha sido rica en seguridad para la gente", reclamó el obispo católico Gaspar Quintana, difundió la agencia de noticias DPA.
El diputado opositor Juan Carlos Latorre agregó que "los organismos ficalizadores hacen la vista gorda" a las condiciones de seguridad de los mineros en la zona.
El gobierno, que envió a ministros y viceministros a la zona, reiteró hoy que hará "todos los esfuerzos posibles" para sacar con vida a los trabajadores.