El avión de la empresa nacional, Turkish Airlines, cumplía el vuelo número 634, desde Estambul a Diyarbakir, donde se precipitó en la fase de aterrizaje, en medio de una espesa niebla que dificultaba la visión en la noche.
Según testigos y responsables de la compañía aérea ésa pudo ser la causa del accidente, ocurrido en el sector militar del aeropuerto, cerca de la frontera con Siria, aunque las autoridades esperan encontrar la caja negra para determinar el motivo de la tragedia. (Télam-SNI).-