(DIARIOC, 04/08/2009) Las exigencias laborales estresan a los padres y les quitan tiempo para estar con sus hijos. Los adolescentes y los jóvenes ven esto como la peor manera de vivir. Por eso, quieren un futuro diferente. Anhelan lo que privilegiaban sus abuelos o sus bisabuelos: formar familias felices antes que triunfar profesionalmente y ganar mucho dinero.
Estos datos surgieron de una investigación nacional y fueron confirmados por un sondeo de LA GACETA entre adolescentes tucumanos. Los chicos explicaron que temen no conseguir trabajo en el futuro y que por eso prefieren estudiar carreras cortas que tengan buena salida laboral y, de esa manera, poder concretar sus proyectos.
Fuente/ lagaceta.com.ar