“El uso dañino del alcohol es un problema en todo el mundo y causa millones de muertes, incluyendo cientos de miles de vidas jóvenes. No es sólo un factor causal de muchas enfermedades sino un precursor de la violencia y las lesiones”, señala en un comunicado Ala Alwan, subdirector de la división de Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental de la OMS.
Enfermedad y lesiones
El alcohol está detrás de 60 tipos de enfermedades y lesiones. Su consumo se relaciona con la cirrosis hepática, la epilepsia, las intoxicaciones, los accidentes de tráfico, la violencia y varios tipos de cáncer, incluidos el colorrectal, el de mama, el de laringe y el de hígado.
“Hace seis o siete años, no teníamos evidencias claras de una relación causal entre el consumo de alcohol y el cáncer de mama. Ahora las tenemos”, ha explicado a Reuters Vladimir Poznyak, responsable de la unidad de abuso de sustancias de la OMS, que coordinó el informe.
Clandestino
El alcohol de producción casera o ilegal -que elude los controles gubernamentales y los impuestos- supone casi el 30% del total del consumo adulto en el mundo. Y algunas de esas bebidas son tóxicas.
En Santiago del Estero, los estragos que causa el alcoholismo son similares a los del resto del planeta. “El consumo indebido de alcohol afecta no sólo al individuo, sino también a su trabajo, en la familia y en la sociedad”, dijo oportunamente la titular del Programa Provincial de Prevención contra el Alcoholismo y la Drogodependencia, Claudia Tarchini.
“De los más de 1.000 pacientes que ingresan por semana en el Servicio de Emergencias del Hospital Regional, el 9,8% tiene relación con el consumo de drogas o alcohol. De ese 9.8% un 60% aproximadamente tiene como relación al alcohol”, manifestó.
En tal sentido, remarcó: “Aquí estamos hablando únicamente del Hospital Regional, un centro que asiste a personas graves y que no tienen recursos, ya que también pueden asistir a otros centros de salud privados si hay accidentes de trabajo”.
Según la OMS, beber moderadamente puede tener un efecto beneficioso en la enfermedad cardíaca y el accidente cerebrovascular (ACV). “Sin embargo, el benéfico efecto protector del alcohol para el corazón desaparece en los casos de ingesta excesiva”, indicó.
Una de las maneras más efectivas de frenar el consumo de bebidas alcohólicas, especialmente entre los grupos más jóvenes, es elevar los impuestos, subraya el informe. Establecer límites de edad para comprar y consumir alcohol y regular los niveles de alcoholemia en los conductores también reduce el abuso si se aplican, pero pocos países emplean estas políticas.
Fuente: elliberal.com.ar