El ripio de la calle Esteban Echeverría aún estaba húmedo. La lluvia del lunes por la noche había quitado el polvo que cubría las hojas de los árboles y de las plantas, y el verde resplandecía bajo el sol en todos los rincones. Cualquiera hubiera dicho que en este barrio lo único que no falta es el agua; sus habitantes dicen lo contrario. Mientras que en otras zonas donde había problemas con el suministro, como Yerba Buena, el servicio fue normal ayer, en Villa Carmela aún padecen el calvario de vivir sin agua.
Karina Durán tiene todo programado. En el barrio sólo reciben agua de 13 a 14 y de 1 de la madrugada a 6. Durante la siesta ella carga el bidón con el líquido que usan para bañarse (hay tan poca presión que el tanque no se llena).
"El problema en Villa Carmela es que la bomba que extrae agua de uno de los principales pozos funciona intermitentemente; no podemos dejarla andando las 24 horas porque se alimenta de un grupo electrógeno y es necesario pararlo cada determinado tiempo, como cualquier motor a explosión", justificó Augusto Guraiib, gerente de Coordinación Técnica de la SAT. "EDET está trabajando en la electrificación de la bomba y entre hoy (por ayer) y mañana (por hoy) deberían terminar. Con esto, el pozo va a funcionar todo el día y se va a solucionar el problema en gran parte", agregó.
En la casa de Karina viven cuatro adultos y cinco chicos: ella, su hermano, su cuñada y su esposo, y los hijos de los dos matrimonios. Por la noche llena las botellas y enciende el lavarropas. "Los chicos no saben lo que es tirar la cadena porque nunca lo pudieron hacer", expresó la mujer para dar una idea de la gravedad del problema.
Su vecina, Silvia Cristina Palacio, ensaya una explicación. "A nosotros nos dijeron que no tenemos agua, porque usan el pozo de nuestro barrio para darles agua a los del San José de Calasanz y del Mirador. Pero el problema se agrava cuando empieza a hacer calor. Ayer (por el lunes) no tuvimos nada de agua; hoy (por ayer) nos dieron un poco, pero no alcanza", protestó la mujer.
Según Guraiib, toda la zona piedemontana se abastece de agua a través de un sistema mixto, que combina la captación superficial con la extracción de pozos. "El acueducto alimenta a buena parte de estos barrios; a raíz de los arreglos que se le está haciendo en Anfama tuvimos que suplir ese caudal con el agua de los pozos, que de por sí dan mucho menos líquido de lo que se necesita", aseguró el funcionario.
En Tafí Viejo
En la puerta de su verdulería en Villa Obrera, María Laura lavaba papas en un balde. "No tengo agua ni en mi casa (en el barrio Oeste III) ni en el trabajo. A la mañana temprano, cuando llego, cargo un par de baldes con las últimas gotas que salen de la canilla y con eso limpio las verduras. En mi casa, para lavar la ropa y bañarme, tengo que esperar hasta la 1 o las 2 de la madrugada", se quejó.
En tanto, Guraiib contradijo esta versión y afirmó que en Villa Obrera el servicio está habilitado diariamente de 6 a 24. "El año pasado nos quemaron cubiertas, pero este año nos agradecieron los trabajos y todos los martes tenemos reuniones informativas", concluyó sorprendido.
Fuente: lagaceta.com.ar
