La novedad trascendió días pasados y fuentes religiosas aseguraron a EL LIBERAL que la noticia será dada a conocer oficialmente recién en los próximos días por el titular de la diócesis de Santiago del Estero.
Hasta el momento, la noticia se manejó sólo en ámbitos eclesiásticos y la conocían únicamente personas ligadas estrechamente a la actividad de la parroquia local, especialmente, aquellas que tuvieron que ver en las acciones que se llevaron a delante en pos de este objetivo, quienes no ocultaron su satisfacción por el logro.
Desde 1938, hubo gestiones de feligreses y autoridades de la Iglesia santiagueña para lograr la coronación de Nuestra Madre del Consuelo. Un documento de la época de monseñor Andino Rodríguez y Olmos, reza: “Y así aceleremos el día, que acaso no esté lejos, en que la misma dulce Madre nos haga gustar por medio del Vicario, de su Hijo Jesucristo, el inmenso consuelo de ver coronada a la Virgen de la Consolación de Sumampa con la coronación pontificia en augusta e inolvidable ceremonia”.
Con la llegada del obispo Juan Carlos Macarone a la diócesis de Santiago del Estero, se inició un intenso trabajo con el fin de conseguir que la Santa Sede autorice la coronación de la Patrona. El prelado presentó una carta el 29 de diciembre de 2000 al Vaticano, la cual fue contestada desde Roma el 16 de febrero de 2001 por el arzobispo secretario, Francesco Pio Tiamburino, en la que le manifestó que se recibió con agrado la petición y se dispuso llevar a cabo el examen del caso, siempre y cuando se cumplan con los requisitos previstos, fotografías, informe histórico, teológico, petición de asociaciones civiles y firma de devotos.
La Santa Sede corona sólo aquellas imágenes que por la inmensa devoción de sus fieles gozan de gran popularidad y culto, de tal modo que el lugar de veneración haya llegado a ser centro de un genuino culto litúrgico, con antiguo apostolado cristiano en cualquier parte del mundo.
Dentro de los fundamentos para la Coronación, se destaca que Nuestra Señora del Consuelo, posee uno de los festejos religiosos más importante del Noroeste argentino y se destaca por contar con más de trescientos setenta y ocho años de historia, su veneración es anterior a la conformación de nuestro país y la creación del Virreinato del Río de la Plata.
Fuente/www.elliberal.com.ar
